Nadando con confianza
8 enero, 2024Resulta interesante que dediquemos unas líneas a revisar una reciente norma del Parlamento Europeo que, según se señala por parte del mismo, pretende dar respuesta a las expectativas de la ciudadanía en cuanto a la protección y restauración de la biodiversidad, el paisaje y los océanos. Según se expresan en las propuestas 2(1), 2(3), 2(4) y 2(5) de las conclusiones de la Conferencia sobre el Futuro de Europa.
Los datos actuales señalan que más del 80 % de los hábitats europeos están en mal estado. Lo que motivó que en junio de 2022 la UE propusiera una Ley de Restauración de la Naturaleza, con la que favorecer la recuperación a largo plazo de los ecosistemas terrestres y marinos deteriorados, alcanzar los objetivos climáticos y de biodiversidad de la UE, así como cumplir con sus compromisos internacionales, en particular el Marco Mundial de Biodiversidad de Kunming-Montreal.
La Ley de Restauración de la Naturaleza de la UE, consensuada con los Estados miembros, busca regenerar los ecosistemas degradados de sus territorios, contribuir a alcanzar los objetivos climáticos y de biodiversidad de la UE y mejorar la seguridad alimentaria. El acuerdo alcanzado con los Estados miembros se adoptó con 329 votos a favor, 275 en contra y 24 abstenciones. Antes de publicarse en el Diario Oficial de la UE y entrar en vigor veinte días después, el Consejo debe adoptarlo.
Partiendo de los objetivos marcados, la norma establece que los Estados miembros deben restaurar al menos el 30 % de los hábitats contemplados en la nueva ley (desde bosques, pastizales y humedales hasta ríos, lagos y lechos coralinos) para que pasen de un estado deficiente a uno bueno en 2030, porcentaje que aumentará al 60 % en 2040 y al 90 % en 2050. De acuerdo con la posición del Parlamento, los países de la UE deberán dar prioridad a las zonas de la Red Natura 2000 hasta 2030.
Igualmente, cuando un área se encuentre en buenas condiciones, los países de la UE velarán que no se deteriore de manera considerable. Los Estados miembros también tendrán que adoptar planes nacionales de restauración que detallen cómo pretenden alcanzar estos objetivos.
Es por lo que ahora corresponderá a los Estados miembros adoptar planes nacionales de restauración que detallen cómo pretenden alcanzar estos objetivos.
Javier Cenzual Miñano